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La predicación Expositiva y la Autoridad del Predicador
Sesión 9 – John MacArthur 07 de marzo 2014
Hay una urgencia y una gran importancia de contar con autoridad en nuestra predicación .
Comencemos con Tito 2:15 – “Esto habla, y exhorta y reprende con toda autoridad. Nadie te menosprecie.”
La palabra autoridad parece agobiante para muchos. La palabra es importante. El predicador no está diciendo historias , dando ideas , etc Él habla con autoridad . A menudo esta palabra se traduce como ” mandamiento”. Cuando el predicador habla, él manda. En el Sermón del Monte 7:29 – Jesús hablaba con autoridad / imperativamente . Marcos 1:22 – “Y se admiraban de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas”. La predicación de Jesús era diferente a la de los escribas. Su enseñanza estaba al mando y la forma en que trató el Espíritu inmundo también estaba al mando. Él manda con autoridad.
Lucas 4:36 – Tenía un tono de mando en su enseñanza. Jesús tenía una autoridad que fue más allá de los demás maestros. La pregunta de ellos era: ” ¿Quién te dio esta autoridad? ” ¿Cuál era su autoridad? Su autoridad era tradición, la formación, y un título. [Jn. 7:14-18] – Su enseñanza no era suya, sino del que lo envió. Él vino de Dios, ese fue el origen de su autoridad. Jn. 8:28 – Él fue enseñado por el Padre ; v 38 – Él lo vio en el Padre; v 40 – Él escuchó la verdad de Dios. Jn. 12:49 – Habló como un mandamiento del Padre. Hablaba con autoridad porque él había sido ordenado por Dios .
Lo que el apóstol Pablo dice a Tito que él tiene que ordenarle a las personas – tienen que hacer lo que Dios ha declarado y lo que Dios demanda. No tenemos otra opción.
Predicación que manda y con autoridad no es la tendencia. La tendencia es darles lo que quieren. La gente va a la iglesia a ser entretenidos y a escuchar recomendaciones, pero no se les ordena.
Me temo que hay muchos predicadores que son cobardes. Tienen miedo de decir: ” tienes que… ”
El método es habla, exhorta, reprende. Hablamos con el fin de un entendimiento y exhortamos para obtener la obediencia y reprobamos para recordarles las consecuencias de la desobediencia. Ahora, eso lo hacemos en amor, pero es lo que debemos de hacer.
El énfasis es: “que nadie te menosprecie “. -El predicador es el encargado de hacer cumplir la ley de Dios-
Lumbrera 
Excelente mensaje para un pastor, Dios les bendiga